Tecnología Sin Zanja, una realidad al servicio de nuestras redes
(Artículo publicado en la Revista Obras Urbanas número 99)
Habitualmente a las tecnologías de rehabilitación y/o construcción de tuberías sin apertura de zanja se las denomina “nuevas tecnologías”. Esa denominación es debido a la necesidad de diferenciarlas de otro tipo de tecnologías más extendidas en el ideario de la sociedad, la reparación y sustitución de tuberías mediante la excavación en el terreno y posterior relleno de tierras, denominadas comúnmente como “tecnologías tradicionales o convencionales”. Esta diferenciación que ha llegado hasta nuestros días da a entender erróneamente que las primeras son tecnologías y procedimientos que aparecen recientemente, cuando la realidad difiere enormemente ya que las tecnologías sin zanja están implantadas hace muchos años en Europa, en España y en el mundo en general. Aunque estas técnicas poco invasivas se llevan utilizando hace siglos, no es hasta los años 70 del siglo XX cuando gracias al desarrollo tecnológico, se empiezan a generalizar el uso de este tipo de tecnologías impulsadas por la necesidad de dar soluciones a los problemas existentes en las redes de abastecimiento y saneamiento en puntos críticos de las ciudades y de la industria.
Las tecnologías sin zanja representan un conjunto de procedimientos cuya finalidad es construir, reemplazar o reparar todo tipo de conducciones con mínima excavación y afección en superficie. Son una alternativa real a las obras de sustitución de tuberías con zanja; y además resuelven problemas en donde la zanja no es viable desde un punto de vista técnico, de seguridad, medioambiental, económico.

Manga o encamisado CIPP (Cured in Place Pipe) = TUBERÍA NUEVA SIN ABRIR ZANJA
Técnica de renovación que consiste en la inserción dentro de la conducción de un tubo flexible de matriz fibrosa, que se impregna con una resina termoendurecible y que produce un tubo estructural una vez curado.” ISTT (International Society for Trenchless Technologies)
Las tecnologías de construcción o rehabilitación de tuberías sin apertura de zanja engloban un conjunto de procedimientos constructivos y operativos en los que se pueden encontrar, métodos de construcción o renovación y también métodos de rehabilitación de tuberías existentes.
De entre todas las tecnologías sin apertura de zanja disponibles, el encamisado con manga continúa curada “in situ” (CIPP con sus siglas en inglés) se ha convertido en el método más extendido y con mayor presencia a lo largo del planeta. La gran capacidad de adaptación de los equipos en zonas con poco espacio y su amplio rango de aplicaciones para dar soluciones a diferentes problemas en las tuberías existentes, le convierten en un método constructivo óptimo para el desarrollo de las redes en nuestras ciudades.
En 1971, Insituform cambió para siempre el sector de la construcción y mantenimiento de las redes de abastecimiento y saneamiento, creando un sistema constructivo para la rehabilitación de tuberías, sin necesidad de realizar enormes excavaciones y zanjas para retirar la antigua tubería e instalar la nueva. Es por ello que la rehabilitación de tuberías mediante manga continua CIPP representa una tecnología que contribuye a mejorar en las áreas, medioambiental, social y económica.
- Área medioambiental. Sin excavaciones, ya no sólo no es necesario maquinaria pesada ni grandes desplazamientos, sino que tampoco es necesario el desecho del material de excavación a vertedero ni el aporte de material de relleno desde canteras. Por lo que minimiza el impacto en zonas sensibles y el transporte de y hasta la zona de actuación.
- Área social. Se reducen las afecciones a las personas y vehículos. Se reducen los ruidos y el tráfico generado por la propia actuación.
- Área económica. El ahorro en costes respecto a los procedimientos constructivos tradicionales es importante.
Insituform Technologies Ibérica, fundada por Eric Wood, mantuvo la patente del encamisado mediante manga continúa curada “in situ” hasta 1994. A partir de 1995, con la expiración de la patente, fueron creándose nuevas empresas que se unieron al sector y que ayudaron a expandir el floreciente mercado de la rehabilitación de tuberías.
Esa ventaja de 23 años respecto a las demás empresas del sector ha permitido a Insituform construir su marca y consolidarse como líder absoluto en el mercado a nivel mundial. Insituform Technologies Ibérica, S.A. empezó́ su actividad comercial en España en 1999, si bien es cierto que anteriormente ya se había introducido el sistema en casos puntuales, bien en obras de especial importancia por su localización, bien a través de licenciatarios locales que realizaban sus actividades y se complementaban con la rehabilitación.
En la actualidad, Insituform está presente fundamentalmente en el mercado local ibérico y uno de los activos con los que hoy día cuenta la empresa es precisamente la especialización en el producto manga. A partir de esta especialización, la empresa colabora en la parte de diseño en proyectos relacionados con el ciclo integral del agua a través de su departamento de estudios-comercial. Además, Insituform está presente en los diversos foros técnicos relacionados con el mundo del agua y se ha preocupado históricamente por hacer de la prescripción un tema de relevancia. De igual forma, el asesoramiento técnico en las diferentes obras ha sido un tema capital para la compañía. Es por todo ello que en obras de gran envergadura y de una complejidad añadida, Insituform sea la empresa de referencia para el mercado donde opera.
Tecnología
Para la implementación de la tecnología CIPP, se establecen cinco etapas que deben llevarse a cabo sin excepción en todas las intervenciones e instalaciones:
- ESTUDIO Y DISEÑO
Los técnicos de Insituform realizan una inspección inicial completa de las tuberías a rehabilitar para tomar mediciones exactas del tramo o tramos a intervenir, identificando y midiendo cualquier elemento presente en la red. A partir de esta información, cada manga se diseña individualmente, en función de profundidades, cargas, efluentes, etc. - TRABAJOS PREPARATORIOS
Mediante robot fresador, se eliminan obstáculos, incrustaciones y sedimentaciones y se localizan las acometidas. - FABRICACIÓN DE LA MANGA
La manga se diseña de forma personalizada para cada proyecto. Está compuesta básicamente de fieltro y/o fibra de vidrio que se impregna en una resina elegida según el efluente que circula por la tubería. - INSTALACIÓN
Tras una nueva limpieza de la tubería se introduce la manga por inversión, provocando el empuje necesario para que se adapte a la geometría de la tubería, y se procede al curado de la manga, mediante el cual la resina se endurece, convirtiendo a la manga en autoportante e independiente de la tubería. Para conseguirlo Insituform cuenta con las tres tecnologías posibles:- Inversión por columna de agua y curado con agua sobrecalentada
- Inversión por presión de aire y curado con vapor de agua
- Instalación por tiro y curado con luz
- RECEPCIÓN
Un robot fresador realiza la apertura de acometidas en el caso de que las hubiese y se efectúa una última inspección del resultado con cámara CCTV. Por último, se realizan pruebas de estanqueidad y/o presión, y la desinfección de la tubería en el caso de redes de agua potable, así como ensayos mecánicos según la normativa vigente, para asegurar la idoneidad del resultado final.

Camino por recorrer
Se estima que ya en 2005 el mercado de la rehabilitación sin apertura de zanja en España era de unos 22.000 metros al año, distribuido en todos los diámetros y siendo exclusivamente en tuberías de saneamiento en el que el fluido discurre por gravedad. Esta longitud fue creciendo un 15%anualmente, llegando a sobrepasar los 30.000 metros en el año 2008.
Con la incorporación en el mercado de más empresas de tecnologías sin apertura de zanja y la gran apuesta realizada por las empresas gestoras del agua de grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Córdoba, a partir de 2018 se registró un gran crecimiento, por encima del 20% anual, que dió como resultado la rehabilitación sin apertura de zanja en España de más de 90.000 metros en 2021, de los cuales la gran mayoría corresponde a rehabilitaciones de tuberías de saneamiento en el que el fluido discurre por gravedad, pero en el que día a día, se está incrementando el porcentaje de rehabilitaciones de tuberías de abastecimiento en el que el fluido discurre a presión y que precisamente Insituform, debido a su gran ventaja competitiva, está liderando estas actuaciones.
Según los datos del sector del agua urbana 2020 del XVI Estudio Nacional de Suministro de Agua Potable de la Asociación Española de Abastecimiento de Agua y Saneamiento (AEAS) y la Asociación Española de empresas gestoras de los servicios de agua urbana (AGA), la longitud de la red de abastecimiento existente en España es de 248.245 kilómetros y la longitud de la red de tuberías de saneamiento es de 189.203 kilómetros.
Sin tener en cuenta el tipo de sistema de construcción o el procedimiento constructivo, en el mismo estudio se estima que se actúa anualmente en el 0,43% de la red de abastecimiento y en el 0,32 % de las tuberías de saneamiento, dando como resultado que actualmente en España se renuevan 1.067 kilómetros y 605 kilómetros respectivamente. Estos datos ponen de manifiesto que la inversión en renovación en España es muy inferior a los países de nuestro entorno, llegando al 1% del total de renovación en Suecia, al 1,1 % en Alemania o Países Bajos o al 1,2% de Dinamarca.
Si tenemos en cuenta la estimación del mercado de la rehabilitación mediante encamisado con manga continua curada “in situ” en 2022, alrededor de 100 kilómetros al año, esta supone entorno a un 5%sobre la longitud total renovada al año con todos los sistemas constructivos. Si comparamos la longitud realizada en España y el porcentaje de rehabilitación sobre el total renovado anualmente, con los países de nuestro entorno, nos da una clara visión del camino que queda por recorrer en España.
Países como Dinamarca, donde los sistemas de rehabilitación sin apertura de zanja suponen un 35% (unos 350 kilómetros al año) del total de renovación (alrededor de 1.000 kilómetros al año) como Alemania, Países Bajos y Suecia donde los sistemas de rehabilitación sin apertura de zanja suponen el 40%, suponiendo 2.500 kilómetros al año en Alemania y Suecia o 500 kilómetros en Países Bajos, del total de renovación de cada país.
Queda claro que, en estos países, los sistemas de rehabilitación de tuberías sin necesidad de excavaciones suponen la solución preferente de renovación frente a otros sistemas, relegados estos a los casos en los que la rehabilitación sin apertura de zanja no es aplicable debido a que es necesaria mayor sección de la tubería que simplemente la tubería está en tan mal estado que solo se puede renovar sustituyéndola. Este aún no es el caso de España, en la que el mercado está muy por debajo de esos datos. Aún así, el sector de la tecnología sin zanja emplea a 40.000 personas en España y, año a año, el porcentaje de tubería rehabilitada mediante sistemas sin apertura de zanja aumenta respecto al total renovado. Y también, año a año, la experiencia acumulada y la gestión a la hora de afrontar nuevos retos aumenta, considerando estos sistemas como métodos totalmente implantados en el sector de la construcción.