Mapas inteligentes para poner freno al fuego
Mapas inteligentes para poner freno al fuego: los planes de gestión de incendios canarios que se emulan en Europa
España está viviendo una situación crítica en lo que a incendios forestales se refiere. En lo que va de año, y de acuerdo con las estimaciones por satélite del Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales (EFFIS) los fuegos han arrasado casi 220.000 hectáreas por todo el país. Es la peor temporada de incendios desde 2020, por delante de 2012, el año con registros de superficie quemada más altos.
Nos encontramos en riesgo extremo por fuego en casi todo el territorio, una situación precedida por un otoño seco, y un inverno y una primavera más cálidos y menos lluviosos de lo normal. Las altas temperaturas y el viento son el mayor causante de los incendios y de su inestabilidad, pero también se han identificado otros intencionados o causados por el uso de maquinaria durante tareas agrícolas. El hecho de que desastres se estén produciendo en zonas de difícil acceso hace más complicadas las labores para paliarlos.
Prácticamente la totalidad de las comunidades autónomas han sido afectadas por los incendios. A fecha de 02 de agosto, continúan en activo en regiones como Galicia, Castilla y León, Asturias, Navarra o Extremadura.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) a nivel estatal está empleando datos estadísticos y análisis provenientes del Ministerio de Transición Ecológica, la Aemet y del Centro Europeo de Prevención y Vigilancia para diseñar su estrategia de actuación. En este sentido, la tecnología juega un rol crítico para mejorar la prevención y la respuesta con la que poner freno al fuego.
Un simulador de incendios forestales pionero
Un claro ejemplo de cómo la innovación ayuda en la labor de paliar los incendios forestales es el del Cabildo de Gran Canaria – región que, además, se encuentra actualmente en alerta por riesgo extremo debido a las altas temperaturas –.
Como parte de su iniciativa ALERTAGRAN, ha implantado un simulador 3D de incendios forestales por escáner pionero que utiliza sistemas de información geográfica (GIS) para analizar datos en tiempo real con los que prever cómo se va a comportar el fuego, a qué zonas alcanzará, cómo se moverá y en qué momento ocurrirá para actuar en consecuencia. El objetivo de este proyecto es la mejora de la gestión ante incendios forestales y fenómenos meteorológicos adversos.
El simulador ha sido desarrollado por Tecnosylva con la tecnología ArcGIS de Esri, empresa líder en location intelligence, que permite analizar la información recogida desde un punto de vista espacial para plasmarla en un mapa, estudiarla y tomar decisiones más ágiles y acertadas.
El sistema permite el cálculo diario de riesgos a través de simulaciones automáticas de posibles escenarios sobre los incendios forestales. La información no solo se puede ver en el simulador 3D, sino que puede difundirse en formatos como imágenes, datasets geográficos, tablas, etc. para realizar múltiples evaluaciones de los escenarios simulados en función de distintos parámetros.
En uso desde el 1 de enero de 2022, el simulador ha realizado 69.445 simulaciones automáticas, con un total de 556.540 horas simuladas. Los resultados muestran 4,798,202 hectáreas quemadas y 58.549 edificios impactados.
Proyecto de calado europeo
La situación de riesgo extremo por incendios no solo está afectando a España, sino también al resto de Europa. Alemania, Polonia, República Checa, Austria, Italia, Bélgica o Países Bajos son otros de los países que, de acuerdo al EFFIS, también se están viendo en esta situación.
En estos territorios la tecnología también está adquiriendo gran relevancia. Sin ir más lejos, el simulador desarrollado por Tecnosylva con ArcGIS ya ha llegado a Holanda, implementado por el Nederlands Instituut Publieke Veiligheid (NIPV).
En uso desde el 3 de febrero de 2022, este simulador ha realizado 1.175 simulaciones, llegando a las 14.784 horas simuladas.
Con ArcGIS y los sistemas de información geográfica, este proyecto de implantación europea es capaz de ayudar a frenar los incendios forestales en zonas con casuísticas y climas muy distintos entre sí, como son las Islas Canarias y Holanda.